En Ideas con Café debido a la pandemia llevábamos alrededor de 15 meses en formato home office y en algún momento con los socios de la agencia se tuvo la famosa conversación ¿trabajar en la oficina, home office o híbrido? Esta pregunta parece sencilla pero tiene muchas implicaciones que hay que contemplar, de lo anterior nace este artículo. Bajo ningún término busco ser exhaustivo pero sí dejar clara la intención de compartir algunas ideas que hay que tener en cuenta para tomar o encaminar una decisión.
Pero antes definamos términos, Home office o teletrabajo se refiere a que los colaboradores no realizan sus actividades laborales en las oficinas de la empresa sino cada uno desde su casa o lugar de residencia. El modelo híbrido puede tener dos implicaciones:
Para fines de este artículo, la implicación a la que me referiré al usar híbrido será la primera.
Hay giros de negocio que no permiten un modelo home office o híbrido efectivo, no se trata de que el liderazgo de la empresa no quiera subirse a estos modelos sino que simplemente la actividad comercial y la dirección de equipos o departamentos, muchas veces por circunstancias externas, no se puede desarrollar completamente online.
Durante décadas, con el fin de evitar largos traslados, los trabajadores han optado por elegir una vivienda cercana a donde trabajan. Por otro lado, las empresas velando porque los colaboradores no sufran de largos trayectos para llegar a la oficina y que esto no incida en su estado de ánimo y productividad, han optado por contratar personas que vivan cerca del lugar de trabajo. Para el modelo home office el traslado o la distancia no implica un problema pero en el híbrido sí.
Pensar en un modelo home office efectivo supone que el trabajador cuenta con condiciones cubiertas más allá de las básicas para desempeñar un buen trabajo, por ejemplo, escritorio y silla adecuadas, un equipo de cómputo funcional, una cámara web y un micrófono, auriculares para aislar el sonido del entorno para cubrir reuniones y por supuesto una conexión a internet estable. Asimismo se presupone que se cuenta con el conocimiento y metodologías en línea para gestión de proyectos y una adecuada comunicación multiplataformas.
A primera instancia parece que el no contar con una oficina física reduce los gastos, particularmente algunos costos fijos, puede ser que en algunos casos suceda tal cual pero no se debe caer en la trampa de generalizar porque en ocasiones contar con un espacio físico para el equipo de trabajo permite tener un mejor manejo de costos.
No hay que perder de vista que el colaborador trabajará desde casa por lo que saltan otras preguntas que hay que responder:
En caso de inclinarse por el modelo híbrido saltan también algunas implicaciones:
No todas las personas ven con buenos ojos el tema del teletrabajo, algunas son puros paradigmas generacionales y otras son preocupaciones legítimas. Ocupa tiempo en reunirte con cada uno para explicar abiertamente los motivos por los cuales la empresa ha decidido optar por un modelo home office o híbrido y en qué le beneficia. Estas han sido algunas objeciones que he escuchado de clientes, proveedores y colegas, las presento tal cual, no significa que así sea:
Aún es muy temprano para deducir qué cantidad de empresas y trabajadores elegirán el formato home office y/o híbrido, porque para que estos funcionen se requiere que ambas partes estén claras con los beneficios, implicaciones y retos. Ningún modelo es perfecto pero puede llegar a ser ideal para trabajadores y empresas según la aplicación en cada caso.
Leave a Comment