Miedo a hablar en público
Hablar en público está entre las actividades que más miedo producen en las personas, junto a subir a un avión.
Esa sensación de nervios antes de pasar al frente a dar una charla es más normal de lo que parece, todos hemos experimentado ese sentimiento pero la diferencia radica en cómo reaccionamos ante este. Según múltiples estudios e investigaciones, hablar en público está entre las actividades que más miedo producen en las personas, junto a subir a un avión.
Es importante tomar en cuenta que el miedo a hablar en público no es exclusivo de una conferencia o cátedra, también puede darse en reuniones informales como pláticas entre amigos o grupos de cualquier índole. A continuación te doy estos consejos que espero te sean de beneficio.
Un solo punto: Estudia y organiza el tema que quieres tratar, entre mejor organizadas estén tus ideas el mensaje fluirá de manera natural y con claridad. Piensa en varias ideas que te lleven a un solo punto que irás desarrollando durante tu exposición, esto te ayudará a no salirte del tema y si en algún momento te desvías un poco también te ayudará a retomar el rumbo.
No te des por vencido antes de tiempo: Muchas veces, de manera consciente o inconsciente, es uno mismo quien provoca esa sensación de nerviosismo. Recuerda que el miedo a algo es aprendido. Cuando te concentras en pensamientos negativos como: “¿Y si hablo muy bajo?”, “¿Y si me confundo?”, “¿Y si no se entiende lo que digo?”, etc. No temas equivocarte, enfócate en los puntos que tienes a favor y no en contra.
Ensayo previo: Practicar antes de la exposición te ayudará a mantener las ideas frescas. Cuando estés en casa prueba hablar en voz alta frente a un amigo, tu familia o frente al espejo como si lo estuvieras haciendo ante varias personas. También puedes grabarte para después hacer una evaluación y conocer cuáles son tus fortalezas y qué aspectos puedes mejorar.
Ten confianza en ti mismo: Ten claro que no te convertirás en un orador de la noche a la mañana. No tengas miedo de equivocarte, recuerda que todos cometemos errores y de los mismos puedes aprender. La confianza que tengas de ti mismo no solo te será útil en el ámbito profesional, sino que también te ayudará a desarrollarte en lo personal.