Angry Birds se ha convertido en todo un fenómeno global, ya sea que lo hayas jugado en un dispositivo móvil o desde tu computadora de escritorio, es más que un juego en donde los protagonistas luchan por recuperar los huevos. Hay algunas lecciones insertas…
1.- Dividir el trabajo en pequeñas cuotas.
Lo cual se traduce en logros más cercanos. Para un vendedor no es lo mismo tener una meta de $3,000.00 al mes que $100.00 diarios. Al final será lo mismo, pero la forma de percibirlo puede ser un aliciente para lograr la meta y no verlo como algo inalcanzable. Juego cortos que no superan los cinco minutos, es a mi criterio, la clave del éxito de esta saga.
2.- Recibir ayuda y apoyarse en los demás.
Cuando trabajamos en equipo se potencian los resultados. Sabemos de antemano que cada pájaro persona que integra un equipo, cuenta con habilidades particulares que si las unimos para lograr un objetivo común, los resultados serán mejores. En todo tiempo debemos estar prestos a ofrecer y pedir ayuda. Cuando sintamos que nos hemos quedado parados en algún nivel, podemos ver a nuestro al rededor (el trueno) a manera de encontrar las herramientas que nos ayudarán a superar cada etapa.
3.- Adaptarse a las circunstancias.
>En la vida es necesario entender que por diferentes razones, muchas de ellas fortuitas, de un momento a otro cambiaremos de escenario. Por lo que debemos saber adaptarnos a las circunstancias, sean estas un desierto (un problema), una mina (un lugar oscuro) o una sitio con pasteles voladores (rodeado de armonía).
4.- Buscar la excelencia.
La excelencia no es un momento sino una forma de vida. No se encuentra tirada en la calle, ni siquiera está en tu lugar de trabajo, la excelente está dentro de cada persona que desea aplicarla. Si hasta este punto sientes que has tenido éxito y has ido avanzando en las diferentes etapas que se han presentado, ten en cuenta que siempre podemos ser mejores. Llevar una vida llena de tres estrellas.
5.- Seguir intentando hasta lograrlo.
Habrán tropiezos y dificultades a lo largo de nuestro camino. Esto no significa que por haber sufrido una derrota, no lo sigamos intentando. Cada error, si lo sabemos aprovechar, deja una enseñanza y esta se convierte en conocimiento que luego puede trasladarse a otras personas. Aunque los cerdos se burlen en nuestra cara, hay que seguir intentándolo.