He escuchado a algunas personas decir: No importa lo que la gente piense de mí, lo que me importa es lo que Dios piensa de mí. Sin duda, se trata de una llamativa idea, y qué bueno que una persona esté interesada principalmente en el concepto que Dios tiene al respecto, pero no es tan simple. A continuación compartiré contigo tres argumentos por los que considero que es muy importante lo que la gente piensa de ti.

Es un concepto bíblico.

En el capítulo 7 del libro de Mateo, Jesús advierte a sus discípulos de los falsos profetas, afirmando que por sus frutos los conocerán, esto quiere decir, por sus acciones los reconocerán, lo cual significa que nuestras acciones dan una impresión de quiénes somos. Además Proverbios 22:1 RV60 dice: De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, y la buena fama más que la plata y el oro.

Puedes encontrar otras referencias bíblicas relacionadas en: Génesis 37:2, Josué 9:9, 1º Samuel 2:24, 2º Samuel 8:13, 1º Reyes 4:34, 10:1-7, Ester 9:4, Eclesiastés 7:1, Mateo 4:24, Marcos 6:14 y Lucas 5:15.

Es un concepto de comunidad.

A menos que tu aspiración sea alejarte de la civilización y vivir como un ermitaño en una cueva, no debe importarte lo que la gente piensa de ti pues no tendrás contacto con otros. Ahora, si la idea del ermitaño no te atrae, debes tomar en cuenta que vives en una sociedad en donde desempeñas diferente papeles que tienen que ver con las relaciones y el buen nombre. Si tienes mala fama las personas desconfiarán de ti.

Es un concepto laboral.

Muchas acciones están vinculadas a las referencias que una persona tiene. Un ejemplo de eso es cuando vas en busca de un trabajo, no basta con que sepas realizar bien el procedimiento de la labor a desempeñar o que llenes el perfil profesional y académico que se requiere, aunado a esto, te pedirán referencias personales y laborales por lo que es imprescindible que presentes varias cartas de recomendación si quieres ser tomado en cuenta en el proceso de selección.

Puertas se pueden abrir o cerrar dependiendo cuál sea el concepto que las personas tengan de ti, y es probable que a este punto te surja la pregunta ¿cómo puedo cuidar mi reputación? Descúbrelo en la siguiente parte de esta serie.

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¿Importa lo que la gente piensa de mí? Parte 2

¿Importa lo que la gente piensa de mí? Parte 3